sábado, 4 de junio de 2011

La persecución

Marcela acababa de salir del edificio donde trabaja y se dirigía a su hogar donde le esperaba su marido, eran como las diez de la noche, las luces en los postes estaban tintineando extrañamente y la fría brisa nocturna le produjo un escalofrío. Al avanzar un par de cuadras sintió tras ella una sombra que seguía su paso pero no lo tomó en cuenta, luego de pasar dos cuadras más, notó que todavía la seguían. Por el terror que le produjo aquello su corazón se empezó a acelerar, sus manos sudaban, se puso nerviosa y le daba miedo mirar hacia atrás. Al estar a muy pocos metros de la esquina, se dijo apenas doble empiezo a apurar los pasos, hizo lo que había dicho sólo que no contaba con que la sombra hiciera lo mismo, ella cruzada la vereda, la sombra la seguía, paraba, la sombra también, etc. Hasta que se rearmo de valor y decidió encararlo, dio vuelta y lo miró, esa sombra no era más que un joven encapuchado, de ojos encarnados y de no más de 18 años, quien de su polerón saco una cuchilla de quince centímetros aproximadamente y le ordeno que le entregara todo lo que tenía. Ella ante esta situación quedó impactada y muy aterrada, pero supo razonar y para no perder su vida prefirió entregarle dinero y un collar de perlas, el cual el joven lo vendió por marihuana en su barrio después de que Marcela lo vio huir. Ella corrió a su departamento, cuando estuvo allí, su marido le abrió la puerta y observó que estaba llorando, ésta lo abraza enérgicamente… y nadie más que ella supo lo que le paso.
              

1 comentario:

  1. SALUDOS, HE DESCUBIERTO TU BLOG POR TEXTALE, ES MUY INTERESANTE TU RELATO...SIN DUDAS HABRA MUCHAS MUJERES QUE SE SENTIRIAN COMO MARCELA...YO INCLUYENDOME GRACIAS A DIOS NUNCA ME HA PASADO Y ESPERO QUE NO ME PASE ....PERO DEBO DECIR QUE ESTA MUY BUEN COMPUESTO TU RELATO....HASTA LA PROXIMA

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